Un
análisis y diagnóstico de la realidad,
por exhaustivo que sea, nunca puede establecer cuáles serán las circunstancias
que se presentaran en los diferentes momentos del desarrollo de un programa: La
situación general ( política, social, económica, cultural, etc.), y la
situación particular del ámbito o sector en que se actúa, exige una adaptación y
educación, teniendo en cuenta el futuro, es lo que lleva a los problemas y
procedimientos que aquí denominamos de estrategia y táctica para la acción.
La
estrategia se puede definir como el conjunto de acciones y de procedimientos mediante los cuales se
procura hacer efectiva cada etapa de un programa o proyecto, con el fin de que
el mismo pueda realizarse desde su punto de partida hasta los logros deseados.
Por
su parte, la táctica, es la educación de lo programado y de la estrategia a
cada una de las situaciones coyunturales o hechos no previstos que se presentan
durante un proceso ejecutivo.
Pero
la colaboración de una y otra, existen siempre dos aspectos principales:
A)
Diagnostico de situación:
Ø Recoger
la información
Ø Analizar
los datos, hechos, problemas y fenómenos
Ø Establecer
cursos de acción posible
Ø Determinar
las consecuencias de cada línea de acción que sea más eficiente para alcanzar
los objetivos propuestos.
B)
Toma de decisiones:
Ø Pasar
a la acción propiamente dicha para realizar una actividad o una tarea en un
momento y en una forma determinada.
En
todos los casos los objetivos y metas propuestas contribuyen una cuestión
sustantivas a la que no se puede renunciar, puesto que es la finalidad de y
razón última del programa o proyecto.
Ahora
bien, la estrategia y táctica se realizan de lleno en la etapa de la
ejecución. Se refiere al arte de
distribuir y aplicar medios y optar por diferentes modalidades operativas, por
lo tanto, una estrategia, es buena cuando permite alcanzar los objetivos con
medios a acordes a esos objetivos, habida cuenta de los valores éticos
sustentados.
De
un modo similar, una táctica es buena, cuando la acción propiamente dicha,
realizada de una coyuntura, se adecua al logreo de los objetivos finales,
permitiendo alcanzar los objetivos intermedios que son más inmediatos.
De
todo lo que hemos expuesto hasta aquí, resulta claro que la gente con quien se
trabaje tiene que ver de manera decisiva a la formulación de esta estrategia.
Cuando se trata de proyectos de base, cabe advertir que la estrategia puede
coincidir o no con la del organismo patrocinante.
excelente trabajo
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